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jueves, 1 de abril de 2010

Pensar como los ordenadores

Algo que he aprendido observando operar a los traders propietarios – los que operan activamente entrando y saliendo del mercado a lo largo del día – es que, en general, les atrae el movimiento y el momento de inercia. Les gusta operar sobre las rupturas de los rangos y les gusta ver señales claras de fortaleza o debilidad antes de comprar o vender.

Muchos programas (informáticos) algorítmicos que operan activamente aprovechan estas tendencias vendiendo fortaleza y comprando debilidad. Si se imagina cientos de ordenadores, cada uno programado para vender con órdenes limitadas en los máximos de X pérdidas y comprar con órdenes limitadas en los mínimos de X periodos – y si se imagina X como una variable escalable en distintos marcos temporales – se hace una idea de lo que mueve los mercados en los marcos temporales más pequeños cuando los traders discrecionales de las instituciones no están activos.

Los traders pueden beneficiarse pensando como los ordenadores.

Esta mañana perforamos los mínimos de la sesión nocturna en los futuros del S&P, pero las empresas de baja capitalización no estaban estableciendo nuevos mínimos; tampoco otros activos de riesgo.

Si sólo miraba el índice S&P, habría querido vender y capturar la ruptura a la baja.

Si pensaba como un ordenador, habría estado comprando con una orden limitada y se habría beneficiado del movimiento de vuelta al precio medio en un entorno lateral.

Buena parte del éxito en la operativa a corto plazo viene de hacer lo que no nos sale de forma natural.

Traducido del original: Thinking Like the Computers

martes, 16 de febrero de 2010

El desafío de mantener la atención en el mercado

Un trader muy experimentado con el que me reuní en una firma de trading propietario en Chicago mencionó el desafío que le suponía mantener la atención en los mercados. Su frase me llamó tanto la atención que saqué el portátil (gracias a dios por el internet móvil) y publiqué una nota en Twitter sobre el tema, junto con un vínculo a un artículo relevante.

¿Qué quiere decir “mantener su atención” en los mercados? Muchos de los traders en su empresa operan 100 o más veces al día. Para ponerlo en perspectiva, los futuros sobre índices bursátiles abren de 8:30 a 15:15 (hora de Chicago). Eso es algo menos de siete horas. El trader que opera 100 veces al día realiza de promedio 15 operaciones por hora o una operación cada cuatro minutos.

La única forma de poder operar con tal frecuencia es tener unas comisiones muy bajas (una de las principales ventajas de las firmas de trading propietario que son miembros de las bolsas), una tecnología superior (introducir las órdenes en el libro rápidamente puede suponer la diferencia entre que se ejecute la orden o no) y la capacidad de concentrarse – no sólo en el movimiento tick a tick de los precios, sino en el movimiento de las órdenes entrando y saliendo del libro.

No sólo cuenta prestar atención; se trata de procesar la información de forma activa, estando atento a pequeñas cosas, tal y como una serie de operaciones grandes que están levantando el precio de oferta. En un instante, el trader ve esas transacciones, se da cuenta de que se están produciendo a un nivel de precios clave y sitúa la acción en el contexto más amplio de la estructura del día (con/sin tendencia). No debería sorprender, por tanto, que mi libro sobre el rendimiento de los traders (que incluye a dos traders de esta firma) compare la operativa electrónica activa con el trabajo de los controladores aéreos: muchas cosas que se deben seguir continuamente y un riesgo real de lapsus en la concentración.


Considere todos los factores que interfieren con esta atención continua al mercado:
  1. Distracciones, desde llamadas telefónicas a conversaciones a su alrededor.

  2. El cansancio y los lapsus normales de concentración tras largos periodos de atención.

  3. La frustración tras operaciones malas, operaciones que no se ejecutan y mercados difíciles.

  4. Las preocupaciones por las pérdidas durante las malas rachas.

  5. El exceso de confianza tras tener una buena racha de beneficios.

  6. El exceso de información.

  7. Verse atrapado en una visión fija de los mercados.

  8. Un fallo del ordenador.

  9. El aburrimiento durante los periodos lentos en el mercado.

  10. La visión túnel y la pérdida de la perspectiva global.
Los traders activos necesitan estrategias que puedan utilizar durante el día de trading para ayudarles a mantener su atención en el mercado. Mi próximo artículo en esta serie detallará algunas de estas estrategias.

Traducido del original: The Challenge of Market Engagement

sábado, 22 de agosto de 2009

Reflexiones sobre cómo descubrir nuestra mejor operativa

He aquí un pequeño experimento mental para los traders activos.

Imagine que sólo pudiese hacer dos operaciones al día y que sólo pudiese operar con un apalancamiento máximo de ×2.

Una vez que ha hecho esas dos operaciones, ya ha terminado ese día.

¿Qué ocurriría?

Tendría que ser muy selectivo en su elección de las operaciones. Eso quiere decir que tendría que ser extremadamente paciente y disciplinado.

Tendría que concentrarse en identificar los movimientos más grandes en un día. Eso supone que tendría que centrarse completamente en el mercado, concentrándose sólo en los datos más relevantes.

Tendría que mantener sus posiciones ganadoras y asegurarse de que todas las operaciones tuviesen un ratio de rentabilidad sobre riesgo muy bueno porque no tendría más oportunidades para operar durante el resto del día.

Tendría que operar sólo cuando los patrones en el mercado saltasen a la vista, dándole la mayor confianza posible.

Es una cuestión de oferta y demanda. Si la oferta de operaciones posibles disminuye, cada operación se vuelve más valiosa para el trader.

¿Podríamos muchos de nosotros descubrir quiénes somos como traders – es decir, lo que hacemos mejor – si limitásemos estrictamente el número de operaciones que realizásemos? En ese punto, tendríamos que ser lo mejor que pudiésemos ser, porque no tendríamos otra oportunidad en los mercados.

Tal vez esto sea cierto en la vida misma: la conciencia de lo limitado de nuestro tiempo en la tierra hace que valoremos más cada día, haciendo que vivamos la vida al máximo.

Sin una cierta percepción de escasez, todas las mercancías pierden valor.

Traducido del original: Thoughts on Discovering Our Best Trading

miércoles, 29 de julio de 2009

El aprendizaje implícito, el aprendizaje en un solo intento y el rendimiento en el trading

En mi último artículo, sugerí que buena parte del rendimiento en el trading depende del aprendizaje implícito y que los factores psicológicos afectan al rendimiento hasta el punto en que interfieren con el acceso a lo que sabemos (pero no necesariamente sabemos que sabemos). Abundantes investigaciones han demostrado que las personas pueden aprender gramáticas artificiales sin ser capaz de verbalizar las reglas subyacentes a esas gramáticas. Interesantemente, los pacientes con amnesia total todavía retienen la capacidad de realizar tareas rutinarias, tal y como atarse los zapatos. En estos casos, las personas muestran un aprendizaje que no es explícito. El sello distintivo de ese aprendizaje es que no ha sido adquirido a través de los medios de estudio habituales, sino mediantes la repetición frecuente.

Otra línea de investigación sobre el aprendizaje se centra en el aprendizaje en un único intento. En algunos casos, no parece que la repetición sea necesaria para aprender. Más bien, una única exposición puede generar un aprendizaje duradero. Esto va en contra de la noción de que es necesario mucho estudio para el aprendizaje explícito y que se necesita una repetición considerable para el aprendizaje implícito. Es significativo que los ejemplos típicos de aprendizaje en un solo intento tienen que ver con la novedad: cuánto más destaca algo en nuestra experiencia, más probable es que lo procesemos de forma duradera. Un buen ejemplo de esto es la aversión a un sabor. Estoy en Singapur ahora, en donde el durián es una fruta muy conocida. Una única exposición al durián para aquellos que lo encuentran muy fuerte deja una impresión duradera: ¡es poco probable que se olvide!

Los miedos condicionados pueden ser ejemplos parecidos de aprendizaje en un solo intento. Vemos esto en su expresión más fuerte en el estrés post-traumático: un único evento muy estresante puede producir patrones de evasión, ansiedad y retraimiento que duren toda la vida. Tras el trauma de una violación, por ejemplo, una mujer aprende asociaciones completamente distintas con respecto a los hombres, que alteran su comportamiento.

La novedad y el poder de algunas experiencias de condicionarnos emocionalmente no son variables todo-o-nada. Algunos eventos se consideran más nuevos o más impactantes emocionalmente que otros. Estos son los que es más probable que se mantengan en la memoria. La investigación en el proceso de la psicoterapia ha descubierto que los elementos que más se recuerdan de las sesiones – y que afectan más a los clientes – son aquellos que son nuevos y cargados emocionalmente. Esto no es necesariamente aprendizaje en un solo intento, pero sí es aprendizaje acelerado.

Otro factor que parece separar a los terapeutas con éxito de los que tienen menos éxito, por ejemplo, es su habilidad para generar experiencias nuevas e impactantes desde el punto de vista emocional para sus clientes. Un cliente tiene miedo al cambio y habla sobre ello con otros en una terapia de grupo; otro cliente tiene el mismo miedo y de repente se le pide que cambie liderando el grupo. Superar esta experiencia con éxito muestra a la persona que el cambio no tiene por qué ser amenazador. Es mucho más probable que se internalice esto que un simple mensaje verbal que dice: “el cambio no tiene por qué ser amenazador”.

En lo que fallan a menudo los traders en su desarrollo es que sus eventos más nuevos y emocionalmente poderosos tienden a ser negativos, particularmente en lo referente a perder dinero. Esto puede que no genere un aprendizaje en un solo intento, pero repetido incluso con una frecuencia moderada puede generar un tipo de aprendizaje implícito en el que ciertos tipos de participación en el mercado se vinculan con ciertos resultados negativos. Como todo el aprendizaje implícito, esto probablemente no se verbalice conscientemente. Más bien, es evidente en los cambios repentinos en el estado de ánimo y en los comportamientos bajo ciertas condiciones de mercado.

Para mucha gente, el que el reconocimiento de patrones sea el resultado de un aprendizaje implícito tiene sentido, particularmente entre traders de alta frecuencia. Lo que puede que no esté tan claro es que los problemas que afectan a los traders también pueden ser el resultado de un proceso implícito en el que lo que se aprende se acelera y se cimienta con altos grados de novedad y de impacto emocional. Si eso es lo que ocurre, una charla con un entrenador o un terapeuta puede que no sea la forma más efectiva de tratar estos problemas. Más bien, un aprendizaje positivo guiado en condiciones de novedad y emocionalidad elevadas puede ser lo más efectivo. Esto ayudaría a explicar por qué las terapias de condicionamiento clásicas, tal y como los métodos de exposición sobre los que escribí en Mejorar el rendimiento en el trading ­ – y que también aparecen en El entrenador diario de trading – son particularmente eficaces para los problemas como el estrés traumático y la ansiedad por el desempeño.

Si podemos aprender a estructurar y acelerar nuestro aprendizaje para maximizar la profundidad y la velocidad de la adquisición del conocimiento y las habilidades, esto tiene importantes implicaciones para mejorar el rendimiento en el trading y para tratar con las fuerzas psicológicas que impiden el rendimiento.

Traducido del original: Implicit Learning, Single-Trial Learning, and Trading Performance

martes, 21 de julio de 2009

Operar sobre el flujo de las órdenes: una habilidad perdida, un arte importante

Quiero llamar la atención sobre la excelente entrevista de Damien Hoffman a Mike Bellafiore de SMB Capital. Damien ha reunido una serie de entrevistas de gran calidad en el sitio web Wall St. Cheat Sheet que vale la pena leer. Mike ofrece sus perspectivas desde la primera línea de un grupo de trading propietario en Nueva York. Una cosa que me gusta es que enfatiza la importancia de leer el flujo de órdenes en la operativa a corto plazo.

Mi experiencia es que entender (y poder leer) el flujo de órdenes es un factor importante que separa a la generación de traders intradía de mayor edad y con éxito de los nuevos que simplemente conocen patrones gráficos simples e indicadores. Leer el flujo de órdenes consiste de dos aspectos: 1) ver y entender dónde están las grandes órdenes (de demanda y oferta) en el libro de órdenes; y 2) ver y entender dónde se cruzan en realidad las grandes órdenes.

Piense:

  • Si las grandes ofertas (de contratos) aparecen consistentemente a un precio en particular, pero al final se cruza un volumen relativamente bajo cuando llegamos a ese precio, ¿qué le dice eso sobre el sentimiento de los vendedores?

  • Si aparecen grandes demandas (de contratos) en un grupo de precios adyacentes y se produce un volumen relativamente grande que se va comiendo esas demandas, ¿qué le dice eso sobre el sentimiento de compra?

  • ¿Qué le dice el hecho de que aparezcan ofertas y demandas grandes consistentemente por encima o por debajo del VWAP? ¿En los bordes de rangos de trading?

Si no ve el libro de órdenes, se pierde toda esta información.

Mike opera y entrena a traders; ésta es su opinión sobre el flujo de órdenes:

“Lo que veo con los traders nuevos y en desarrollo es su falta de capacidad para leer la cinta. Cuando tomamos decisiones de trading, leemos la cinta, miramos los gráficos y entendemos el análisis intradía fundamental. Pero veo demasiadas personas que simplemente dependen de los gráficos o de su propio estilo de análisis intradía fundamental. No entienden cómo leer el flujo de órdenes. Y el flujo de órdenes nos da una gran ventaja. Realmente podemos ver los niveles más importantes de una acción en concreto. Por ello, cuando envío por Tweet un nivel en particular y ve que la operación funciona, no es una coincidencia. Si ve que ese nivel no está en sus gráficos, eso tampoco es una coincidencia. Una vez más: vemos los niveles intradía más importantes porque observamos dónde se cruzan las órdenes. Tener esta habilidad le permite tener posiciones mucho más grandes en los niveles importantes y disminuir el riesgo que tendría en una posición. Hace que su porcentaje de operaciones ganadoras sea mucho más consistente. Finalmente, leer la cinta le da una ventaja sobre muchos de los operadores contra los que compite. Vemos demasiadas personas que no saben cómo leer el flujo de órdenes y nos gustaría ver a más traders aprender esa habilidad.”

Muy, muy pocos autores que escriben libros y artículos de trading cubren este tema. Demasiados traders no saben lo que no saben. Cuanto más corto sea el periodo durante el que mantiene sus operaciones abiertas, más importante es ver dónde están las ofertas y las demandas, dónde se retiran y dónde se cruzan.



Traducido del original: Trading Order Flow: Lost Skill, Important Art

lunes, 13 de julio de 2009

Aprendizaje implícito: la clave para el rendimiento en el trading

Mi reciente artículo hizo hincapié en el papel que desempeña una buena planificación en el trading de éxito. Aunque la planificación de las operaciones es tan importante para el trader, como lo es planificar un partido para un quarterback, la realidad es que el rendimiento de un trader, como el del quarterback, es una función conjunta de la intuición y una cuidadosa previsión. El quarterback puede decidir que van a realizar una jugada de pase, con el lateral yendo al medio del campo como receptor principal, pero siendo presionado por los defensas puede optar por pasar el balón a un corredor o salirse de la zona de protección y buscar a otros receptores secundarios. De forma parecida, el trader puede planear una operación en una ruptura por debajo del mínimo del día, pero al observar un volumen muy bajo por las vacaciones, tomar beneficios antes de llegar a su objetivo cuando el NYSE TICK no consigue alcanzar unos mínimos decisivos en un movimiento a la baja.

Una de las experiencias formativas de mi carrera como psicólogo fue observar a los traders de alta frecuencia en Chicago (los que realizan 50-100 o más operaciones al día de forma discrecional) ganar dinero consistentemente, día tras día, semana tras semana, año tras año. Cuando vi cuánto pagaban en comisiones cada día y que aún así ganaban dinero, me di cuenta de que sus habilidades eran mayores que cualquier eficiencia de mercado.

Tal vez lo que me resultó más interesante fue que estos trader normalmente no me podían explicar en palabras cómo estaban tomando sus decisiones. Sí, podían señalas los cambios en el flujo de órdenes, el volumen, etc. – y sí, el tamaño de sus posiciones y sus ideas sobre limitar las pérdidas y tomar beneficios tenían un fuerte elemento de planificación previa – pero la mayoría de sus decisiones eran como la improvisación del quarterback. Me quedó claro que sabían mucho acerca de los mercados, pero no parecían saber lo que sabían.

Darme cuenta de esto me llevó a investigar el campo del aprendizaje implícito mientras escribía mi libro sobre el rendimiento en el trading. También me llevó a este artículo clave sobre la base objetiva del conocimiento subjetivo. Parece ser que, particularmente en el ámbito del reconocimiento de patrones, procesamos el mundo mucho mejor de forma implícita y subconsciente que explícitamente. Cuando conduzco, respondo al movimiento brusco del coche en el carril de al lado prácticamente de forma inmediata, antes de identificar conscientemente lo que ese coche está haciendo. Esto tiene sentido desde el punto de vista evolutivo: si necesitásemos evaluar racional y conscientemente cada amenaza antes de responder, no sobreviviríamos mucho tiempo como cazadores, pilotos de caza o pilotos de coches de carreras.

Un excelente artículo de investigación que me pasó un lector alerta (¡muchas gracias!) señala que el cerebro humano está diseñado para tomar decisiones lógicas de modo implícito. Por ejemplo, una investigación mostró cómo unos individuos a los que se les puso a observar una pantalla de ordenador en la que la mayoría de los puntos se mueven aleatoriamente, pero algunos se mueven con una ruta determinada pudieron al final realizar predicciones precisas sobre la dirección de los puntos programados, más allá de niveles atribuibles a la suerte. Los cálculos matemáticos necesarios para realizar estas predicciones están por encima del nivel de muchos de estos participantes. Más bien, sus cerebros captan las distribuciones de probabilidad en los datos y los sujetos los identifican en base a una “sensación” de lo que ocurrirá a continuación con los puntos.

El motivo por el que la psicología es crucial para los traders, en desarrollo o experimentados, es que el acceso a este conocimiento implícito, sentido, se ve alterado con facilidad por factores como la fatiga, la preocupación, la frustración y la presión por rendir. De hecho, uno de los errores más comunes que cometen los traders es que intentan solucionar los problemas de rendimiento pensando más. Como el insomne que pasa despierto más y más tiempo pensando en intentar quedarse dormido, el trader que analiza y se preocupa por el rendimiento pierde esa “zona” en la que las distribuciones de probabilidad se presentan implícitamente.

Los traders de éxito, con experiencia, saben más de lo que saben que saben. Su rendimiento depende crucialmente de su habilidad para mantener un estado mental en el que puedan acceder a su conocimiento implícito. Mantener esa “zona” será el tema del segundo artículo en esta serie.

Traducido del original: Implicit Learning: The Key to Trading Performance